El resultado de éste árbol de Navidad es espectacular, pero lleva un curro enorme. Se ha hecho con latas de refresco de color verde (no consigo adivinar la marca), y cada una de ellas va unida a un alambre que a su vez van pegados a un poste central. Todo ellos reduciendo el tamaño progresivamente a medida que vamos subiendo hacia arriba.
El resultado es impresionante, es incluso bonito, y cuando la luz refleja en él, aún más.
Vía: Pichicola