El Peugeot 206 es un coche compacto y popular producido por la compañía francesa desde 1998 hasta 2012. El modelo estaba disponible en una variedad de estilos de cuerpo incluyendo hatchback, berlina, station wagon y convertible. También contaba con una gran variedad de motores: motores de gasolina de 1,1, 1,4 y 1,6 litros y motores diésel de 1,4 y 1,6 litros. A pesar de su fama de coche fiable, el Peugeot 206 no está exento de algunos problemas típicos, como los sensores responsables de la gestión del motor. En este artículo, vamos a ver los fallos más comunes de los sensores del Peugeot 206, sus señales y cómo diagnosticarlos.
Sensor de posición del cigüeñal (CPS)
El sensor de posición del cigüeñal detecta la posición del cigüeñal y mide el momento en que el pistón alcanza el punto muerto superior (PMS). Este sensor se encarga de controlar la chispa y la inyección de combustible, lo cual es fundamental para el correcto funcionamiento del motor.
Señales de problemas:
- El motor no arranca;
- No hay chispa;
- Funcionamiento inestable del motor;
- Pérdida de potencia;
- Vibración al ralentí.
Sensores del sistema antibloqueo de frenos (ABS)
Estos sensores miden la velocidad de las ruedas y transmiten los datos al sistema ABS para evitar el bloqueo de las ruedas durante el frenado, especialmente en situaciones de emergencia.
Signos de avería:
- El sistema ABS no funciona;
- El testigo «ABS» está encendido.
Sensor de detonación
Este sensor detecta detonaciones en el motor y ajusta el ángulo de avance del encendido para evitar el encendido incontrolado de la mezcla de combustible y aire. Los problemas con este sensor pueden provocar una pérdida de potencia y un aumento del consumo de combustible.
Señales de problemas:
- Pérdida de potencia;
- Velocidad de ralentí inestable;
- Golpeteo bajo carga;
- Humo negro del tubo de escape.
Sensor de temperatura del refrigerante
Este sensor mide la temperatura del motor y controla la activación del ventilador de refrigeración y ajusta la mezcla de combustible en función de la temperatura del motor.
Señales de problemas:
- Dificultad para arrancar en frío;
- Aumento del consumo de combustible;
- Humo negro por el tubo de escape;
- El ventilador de refrigeración no se enciende.
Sensor de velocidad
El sensor mide la velocidad del vehículo y transmite los datos a varios sistemas del vehículo, incluyendo el control de crucero y el sistema de gestión del motor.
Signos de avería:
- El control de crucero no funciona;
- El velocímetro no funciona;
- Lecturas de velocidad incorrectas.
Sensor de masa de aire
Este sensor mide el volumen de aire que entra en el motor para optimizar la mezcla aire/combustible para una combustión eficiente y ahorro de combustible.
Signos de mal funcionamiento:
- Aumento del consumo de combustible;
- Reducción de la potencia;
- Rendimiento inestable del motor.
Sensor de presión de aceite
El sensor mide la presión del aceite del motor, transmitiendo información al salpicadero del conductor para advertir de una posible baja presión y evitar daños en el motor.
Señales de avería:
- El indicador luminoso de la presión de aceite se enciende con una presión normal;
- El indicador no se enciende al conectar el encendido.
Problemas con el radiador del Peugeot 206
También hay problemas conocidos con el sistema de refrigeración, incluyendo el radiador Peugeot 206. Con el tiempo, los radiadores pueden empezar a tener fugas, especialmente en los modelos más antiguos, lo que puede provocar un sobrecalentamiento del motor y daños en el mismo. Esto puede deberse al desgaste de las juntas o a daños en la carcasa del radiador. En tales casos, es necesario diagnosticar el sistema de refrigeración y sustituir el radiador o partes del mismo si es necesario. También es importante comprobar regularmente el nivel de refrigerante y controlar el estado de las mangueras y el termostato para evitar el sobrecalentamiento del motor.
Conclusión
El Peugeot 206 es un coche bueno y fiable, pero los propietarios deben estar atentos al estado de los sensores y del sistema de refrigeración. El diagnóstico regular y la sustitución oportuna de los sensores defectuosos ayudarán a evitar averías graves y aumentar la seguridad de funcionamiento del coche.
