Si tenemos la suerte de vivir en una casa o chalet, podemos optar por convertir su fachada en toda una celebración de la Navidad. Nuestras ideas para la decoración no tienen por qué limitarse al interior de nuestro hogar; podemos probar con múltiples posibilidades también en el exterior.
Si tenemos un jardín con algunos árboles, sean o no los tradicionales de las fechas, no podemos dejar la pasar la oportunidad de decorarlos del mismo modo que el abeto que nos acompaña en nuestro salón. Guirnaldas, bolas, estrellas y otros divertidos motivos realzarán la figura de esas plantas que tanto nos hemos esforzado en cuidar durante el año, y sin duda atraerán la admiración de los curiosos.
Otra opción es la de colocar figuras adecuadas a la fecha: Papá Noel, renos, elfos del Polo Norte, muñecos de nieve, etc. ¡De esta manera también les daremos unas merecidas “vacaciones invernales” a nuestros gnomos de jardín!
A la hora de colocar la iluminación alrededor de nuestra casa, debemos tener muy en cuenta que hemos de comprar cableado especial para exteriores. No es recomendable, con miras al ahorro, emplear el mismo que hayamos utilizado para el interior, puesto que, por regla general, no poseen las mismas características. Asimismo, antes de entusiasmarnos colocando la iluminación exterior hemos de comprobar que no vamos a provocar ninguna sobrecarga eléctrica en toda la casa, o incluso en la de nuestros vecinos.
Como colofón a las luces exteriores, podemos colocar un letrero de felicitación o una estrella luminosa en lo alto del tejado. No obstante, la norma a seguir es la misma que para cualquier otro tipo de decoración: cuidado con los excesos. Siempre es preferible la discreción y la sutileza antes que la profusión agobiante de formas y colores.
