Hay que tener en cuenta que el 2022 no ha sido un buen año. Hay a quien le ha ido mejor, y a quien está deseando acabarlo. Por eso, a esas personas, que son la gran mayoría, ya empiezan a buscar rituales y hechizos para que el próximo sea mucho mejor que el anterior (y esta vez no se pide demasiado). Pero, ¿cuáles son los mejores?
La tradición de llevar lencería roja el 31 de diciembre, el comer lentejas como última comida del año, o el brindar a la pata coja son solo algunos rituales y hechizos que se conocen pero, ¿hay más? Te hablamos de ellos.
Rituales y hechizos que atraen la buena suerte
Es normal que cada año esperemos con ganas la Nochevieja, para despedir el viejo año y dar la bienvenida al nuevo. Sin embargo, siempre tenemos la ilusión de que ese año sea, o igual que el anterior si te ha ido bien, o mucho mejor. Por eso, hay muchos rituales que se realizan con el objetivo de que se empieza bien el año. ¿Quieres saber cuáles son? Pues toma nota.
Lencería roja
Esta se puso de moda hace unos años y ahora sigue estando. De hecho, en los supermercados fomentan esta idea ya que, unos días antes, empiezan a vender ese tipo de ropa para animar a la gente (y para que, quien no la use, sienta que va a tener mala suerte).
Lo que no muchos saben es que, para que surta efecto, no solo debe ser roja, sino también nueva. Es decir, que no vale el conjunto que tienes en tu casa del año pasado o que te has comprado para ocasiones especiales. No.
Ha de ser completamente nueva para que te augure un año de pasión y de amor. Si no eres de ponértela, puedes optar por la versión «light» que es llevar un lazo rojo en la muñeca izquierda.
Rituales y hechizos de Nochevieja: Tener las puertas abiertas
Otro de los rituales es el que todas las puertas y ventanas (y cajones) de tu casa estén abiertas. Según se dicen, cuando suenan las campanas toda la energía de tu casa se renueva, haciendo que la negativa salga y la positiva entre. El problema es que, si dejas un cajón cerrado, una puerta cerrada… entonces esa energía no saldrá.
Pero tranquilo, que solo tienes que mantenerlo abierto unos 20-25 minutos (antes de las campanadas). Así que no te vas a helar de frío.
Ponte un billete en el zapato
¿Eres de los que lo está pasando mal y no sabe cómo va a llegar a enero? Pues entonces a ti más que a nadie te hace falta que este ritual funcione. Y es que entre los rituales de fin de año está uno que busca llamar al dinero. Se trata de poner un billete dentro del zapato que uses. De esa manera, lo que haces es hacer que el dinero, o el trabajo, lleguen a ti porque no los vas a dejar escapar (de ahí el pisarlos).
Rituales y hechizos de Nochevieja: algo amarillo
Antes hemos dicho que nos hacía falta para el amor algo rojo. Pues bien, en el caso del dinero, hace falta algo amarillo. Da igual lo que sea, pero es importante que se lleve algo de ese color que es el de la riqueza y el poder.
Baño protector y purificante
Sabemos que el 31 de diciembre lo que quieres es lucir tus mejores galas. Sin embargo, si eres de los que necesita rituales para fin de año, y además quieres que funcionen, entonces con este damos fe de que es así. Además, lo puedes hacer de dos formas diferentes.
Se trata de tomar una ducha. Sin embargo, el último agua que debes echarte, ha de ser agua con sal. Para que te hagas una idea, necesitas unos dos litros de agua y algo más de medio kilo de sal. Calienta el agua y echa la sal para que se disuelva. A continuación, llena una o dos botellas. Cuando termines de ducharte, debes echarte ese agua con sal por todo el cuerpo, incluido el pelo.
¿Qué hará esto? Pues por un lado, y siempre con pensamientos positivos, debes desear que la mala suerte y que lo malo se vaya de tu lado. Por otro lado, te va a servir de protección. Y es que, por si no lo sabes, la sal siempre es un elemento que se usa para mantener a raya las malas energías, malos espíritus, etc.
¿Y por qué te decíamos que podías hacerlo de dos maneras diferentes? Pues porque puedes ducharte ese día y así entrar al año nuevo ya protegido (pero irás con el pelo lleno de sal y casi parecerá blanco si lo has hecho bien); o bien cuando llegues a casa, o antes de acostarte, debes ducharte para estar con esa sal varias horas y que te sirva de protección. Y sí, en el primer caso también debes dormir sin ducharte.
Cuando has tenido muy mala suerte, los expertos recomiendan que se hagan este tipo de duchas, bien 3 veces consecutivas (empezando un jueves o un domingo), o bien 5 veces consecutivas (empezando los mismos días, jueves o domingo).