Un servicio completo consta de tres platos: Llano, hondo y bajo.
Para empezar, podemos elegir unos elegantes bajo-platos (de presentación), que nos sirvan de base y decoración para la mesa.
El plato hondo nunca se pone directamente sobre la mesa; siempre tiene que llevar un plato llano de base, y la cristalería debe de ser acomodada estratégicamente, así, tus invitados no tendrán más preocupación que la de degustar la cena.
Frente al plato, en la parte superior, se colocan las copas, detallo: Una de agua, al lado izquierdo, y a la derecha, la del vino.
Una gran duda para muchas personas es el número de cubiertos que se colocan en una mesa, y para que sirvan; pues bien, los expertos brindan una muy simple solución.
Para cualquier comida ordinaria, los cubiertos que deben ir del lado derecho del comensal son cuchara de sopa, cuchillo de pescado, cuchillo de carne y para mantequilla. Los del lado izquierdo son tenedor de pescado y ensalada, seguido del tenedor de carne.