Con la llegada de un nuevo año, la mayoría de las personas corremos a preparar nuestros propósitos que queremos realizar en ese año nuevo que comenzará. Tras un año 2020 muy complicado, este 2021 será el nuestro. La idea es que no dejaremos ni la más mínima oportunidad de escapársenos de las manos. Por este motivo, queremos compartir algunas ideas con vosotros para preparar los propósitos de Navidad.
Si ya lo has hecho, sigue leyendo porque tenemos varias ideas para organizarlos mejor. Pueden servirte para darles orden, estructura y ayudarte a que se cumplan.
Por el contrario, si aún no lo has podido preparar, hoy que tenemos día libre en España puede ser la ocasión ideal para sentarte un rato y hacerlo. Nada mejor que comenzar el año con el foco puesto y todos los esfuerzos orientados a lograr lo que queremos lograr.
Esperamos que estas ideas te ayuden a organizar tus propósitos de Año Nuevo para que en nada sean realidades. ¡A por ellos!
27 Ideas para preparar tus propósitos de año nuevo
1. Autocontrol
Para plantearte tus propósitos de Año Nuevo debes asegurarte de tener mucho autocontrol: saber que eres dueño de tu destino y la única persona capaz (y responsable) de lograrlo.
2. Estrés fuera
Antes de plantear tus propósitos de Año Nuevo piensa que no es una actividad que deba llenarte de estrés y ansiedades. Se trata de una actividad bonita para disfrutar de los días de Navidad y ponerle foco a tus metas.
3. Adiós emociones negativas
No seas duro contigo mismo. Plantea objetivos realistas y piensa en un plan a largo plazo para cumplirlos. No pasa nada si hay momentos de debilidad. Todos los tenemos. Culparte o llenarte de emociones negativas sólo servirá para desmotivarte y alejarte de la meta.
4. Piensa en pequeño
Contrario a lo que solemos decir de ¨piensa en grande¨, pensar en pequeño suele resultar mejor. No se trata de conformarse o de no querer cosas buenas para ti. Se trata de que a veces nos trazamos metas demasiado grandes. Cuando no las cumplimos, solemos llenarnos de frustración y emociones negativas que no nos hacen bien. Abraza las metas grandes y posibles; pero dile adiós a las que son tan grandes que realmente nos remiten al mundo de la fantasía.
5. Sé específico
Tener muchos propósitos de Año Nuevo a la vez suele ser otro error común. Vivimos en una sociedad en la que más es mejor. Pero cuando se trata de metas, menos es la respuesta correcta. Menos ansiedad y mejor foco si nos trazamos objetivos que podremos cumplir.
6. Constancia
Muchos de los propósitos de Año Nuevo que nos trazamos son en realidad nuevos hábitos que queremos incorporar. Para lograr construir un nuevo hábito en tu vida, es necesario tomar decisiones conscientes a lo largo del tiempo.
7. Sistema de respaldo
Una meta dice qué hacer pero no dice el cómo lograrlo. Es importante invertir tiempo desarrollando el paso a paso para lograr lo que nos proponemos. Necesitas tener una meta pero, también construir un sistema que te ayude a ser constante para lograrla.
8. No lo pospongas
Es mala idea comenzar el año sin foco y peor aún posponer las acciones que te acercarán a tus objetivos.
9. Deja el miedo al cambio
A veces nos saboteamos por miedo al cambio. Fuera. Basta. Un nuevo año viene cargado de cambios y pequeñas revoluciones. Todo cambia. No dejes de hacerlo tú por miedo. Los seres humanos evolucionamos constantemente.
10. Reflexiona sobre el año anterior
Es el primer paso. Reflexionar sobre el año anterior te da el suelo para construir los nuevos propósitos. Te dice lo que queda pendiente y te permite analizar el porqué no pudiste alcanzarlo. También te puede dar subidón analizar todo lo bueno -propuesto o no- que haya pasado. Esta es mi parte preferida. Amo analizar los años.
11. Empieza con un solo propósito
Uno a la vez. Esto no quiere decir que no puedas lograr más de un propósito por año, esto sólo significa que debes centrarte en uno a la vez. La buena noticia es que un solo hábito saludable de inicio, desencadena una reacción en cadena. Si te trazas un propósito y ves que lo logras, te sentirás más capacitado para seguir a por el siguiente.
12. Escríbelos en un papel
Escribir hace que tu meta deje de ser una idea o pensamiento invisible, lo que te ayuda a visualizarlo concretamente y a tomar acción. Si no lo hiciste en el Espíritu de la Navidad da igual, puedes retomarlo ahora o desarrollar tu propio ritual para hacerlo. Desde lo más sencillo: escribirlos en un papel normal. Hasta lo más elaborado: creando tu propio mapa del tesoro. En otro artículo te contaremos muy pronto cómo hacerlo.
13. Convierte tu propósito en acción
Piensa en por dónde vas a comenzar y pregúntate: ¿Qué acción fácil podría hacer ahora mismo para empezar con mi propósito? A partir de allí puedes trazar un plan.
14. Haz una lista de lo que necesitas y otra de lo que quieres
Son cosas distintas y a menudo conviene distinguir. Empieza haciendo una lista de todo lo que necesitas. Luego haz otra lista de todo lo que quieres. Poco a poco. Lo primero es antes.
15. Haz tus propósitos sobre ti
No puedes proponerte cambiar a otros o cambiar cosas que no dependen de ti. Otra cosa es pedir deseos de Año Nuevo para el mundo, tu familia, etc.
16. Planea con antelación
Para asegurarte el éxito, antes necesitas investigar el cambio que vas a hacer para organizarte y tener los recursos disponibles cuando los necesites.
17. Elige una fecha para empezar
No es necesario que empieces todos estos cambios a la vez el 1 de enero. Mira tu año y elige en qué fecha comenzar, de acuerdo a cuando creas que puedas tener los recursos disponibles para llevar a cabo tus planes.
18. ¡Ve a por ello!
Cuando llegue el gran día, ve a por ello al 100%. Comprométete y escribe en un trozo de papel o una tarjeta en blanco tu propósito y una frase motivadora que te ayude a conseguirlo.
19. Acepta tus fallos
Si un día te despiertas más tarde, te saltas una clase de yoga, o no buscas la información que necesitas para empezar tu negocio, no te culpes ni te odies.
20. Date una recompensa
Las pequeñas recompensas son muy útiles para animarte a seguir cumpliendo con tus propósitos en los primeros días difíciles.
21. Lee tus propósitos frecuentemente
Cada día, en cuanto te levantes, lee tus propósitos de año nuevo. Y cuando ese mismo día te vayas a dormir, antes de entrar en tu cama ¡vuelve a leerlos! Mantenlos presentes. No pierdas el foco.
22. Sepáralos por áreas
A veces es mejor separar tus propósitos por áreas: estudios, relaciones, salud, dinero. Tenerlos más organizados te ayudará a trazar mejor los planes.
23. Más y menos
Otra buena forma de organizarlos es clasificándolos en las cosas que quieres hacer menos y sacar de tu vida; y las cosas que quieres hacer más. Es visual. Podrías pegarlo en algún sitio visible.
24. Mapas mentales
Otra buena forma de visualizar y organizar tus propósitos es creando un diagrama. Yo suelo comenzar de esta manera.
25. Mes a mes
Así como hemos dicho que un paso a la vez, otra forma de organizarlo es trazarte un propósito por mes. Esto te permitiría ir incorporando las nuevas rutinas poco a poco.
26. En el bote
De cristal (o el que tengas) puedes comenzar a meter tus propósitos de Año Nuevo. En la imagen colocan agradecimientos cada semana. También puede ser una manera de venirte arriba y recordarte al final del año todo lo bueno que has logrado.
27. Un toque de misticismo
No está demás. Ponle toda la buena energía a tus propósitos, todo el año, y cuando los prepares. Yo, por ejemplo, lo relaciono con el Año Nuevo chino. Lo hice así una vez y me gustó mucho, así que he seguido haciéndolo. Dibujo al que será el animal del año según este horóscopo, con los colores de los que quiero llenar mi año. Y, alrededor, agrego mis propósitos de Año Nuevo. Cada cual con si ritual.
Puedes hacer algo divertido, original, lo importante es que te sientes un momento y te des el espacio para reflexionar sobre lo que has vivido. Y, sobre todo, plantees metas para el año que comienza. ¡Vamos a mantenernos enfocados este 2018!