Cada vez es más habitual que en las casas haya al menos un perro o un gato. Sin embargo, cuando llega la Navidad, estas mascotas pueden decidir que el árbol de Navidad no debe estar presente, y aunque lo pones con mucha ilusión, y tanto tu gato como tu perro te dejan hacerlo, cuando menos te lo esperes te lo encontrarás en el suelo. ¿Por qué esa fijación por el árbol?
Si quieres tener una Navidad tranquila en la que tu perro no robe las bolas del árbol, o no intente encaramarse por él y lo tire, a continuación te damos una serie de trucos y consejos que pueden venirte muy bien.
Por qué los gatos y perros se obsesionan con el árbol de Navidad
Imagina por un momento que estás en una casa en la que has conocido todo. Y que, de repente, entra algo extraño, que además es muy alto, grueso y tiene bolas y cosas que hacen ruido y que brillan. ¿De verdad que no te acercarías a ver qué es, a tocarlo e incluso a subirte en él? Lo hacen los niños, y sí, también las mascotas.
Por eso, para ellos es prácticamente imposible evitarlo. Es una novedad, para los gatos un lugar con altura, con lo que les gusta; y además con bolas y objetos que pueden hacer ruido. Así que es habitual intentar subirse en él y agarrar las bolas.
En el caso de los perros, ese colorido les puede. Y además, las bolas tienen un formato como el de sus pelotas, así que las ven iguales e intentan cogerlas para jugar, sin saber que son peligrosas o que no deben hacerlo.
En definitiva, hablamos de un objeto que entra de repente en sus vidas, y que les fascina por el colorido, diseño, tamaño, etc. ¿Cómo van a dejarlo tranquilo?
Trucos para que tu perro no se acerque al árbol
El hecho de que tu perro se sienta atraído por el árbol de Navidad no quiere decir que debas renunciar a este cuando tienes una mascota. Ni mucho menos. Solo has de tener en cuenta una serie de trucos o tips que te ayudarán a llevar una Navidad más tranquila sin que las batallas entre tus mascotas y el árbol acaben en un KO (normalmente del árbol).
¿Quieres saber qué hacer? Toma nota:
Pon papel de aluminio por el suelo
Puedes pintarlo de color marrón, o usar un papel que, al pisarlo, dé una sensación algo desagradable. El objetivo es que, cuando el perro pise, se sienta incómodo en esa zona, y no solo eso, sino que también lo mantenga alejado del árbol de Navidad.
Evita que se acerque con cajas o regalos de Navidad
Es una opción, sobre todo si tu árbol es natural porque el perro tenderá a querer marcarlo, es decir, a orinarse dentro de casa (al fin y al cabo le has traído un árbol). Por eso, para que no acceda al tronco, puedes cortarle el paso con los regalos, cajas o algo similar.
Pon los adornos con cabeza
Si tu perro es aún un cachorro, es normal que este, cuando vea algo que se mueva, vaya a por él. Por eso, en la medida de lo posible, evita poner adornos colgantes, o déjalos solo para la parte superior del árbol. Por la parte baja, que es donde llegará tu perro, puedes poner adornos fijos en las ramas que no destaquen tanto.
Rocíalo con un olor que para tu perro no sea agradable
A los perros hay olores que no les hace mucha gracia. Y con esto no solo nos estamos refiriendo a los malos olores, sino a algunos que, por su intensidad, no les gustan, como colonias, perfumes, etc.
Así que una forma de mantenerlo alejado del árbol de Navidad es usar esto en su contra. Es decir, echarle un spray con ese olor para que ni se acerque.
Eso sí, tendrás que ir renovándolo cada poco tiempo; de lo contrario en un despiste puede acercarse y hacer de las suyas.
Enséñale el árbol
A veces, en lugar de negar a un perro una cosa, lo mejor es dejar que se acerque, que lo huela y que comprenda que es algo que se va a quedar en la casa un tiempo. Al final, lo verá como algo cotidiano y dejará de prestarle atención.
Por ejemplo, podrías colocar el árbol desnudo durante 2-3 días para que el perro se acostumbre a su presencia. Y luego, día a día, ir colocándole adornos «como quien no quiere» hasta terminarlo. Créenos que es una actividad divertida porque se alarga más la decoración navideña. Y tu perro lo verá como algo normal.
Si ya de por sí tienes un perro grande y un poco alocado, lo mejor que puedes hacer es atar el árbol para que no vaya a tirarlo (queriendo o sin querer).
¿Se te ocurren más ideas para que tu perro no acabe con el árbol de Navidad?
